La viuda de Sarepta: el don de la provisión

¿Cómo provee Dios todavía en tu vida hoy? Profundice en 1 Reyes 17:8-24 con Grace Driscoll mientras analiza el don de la provisión a través de la historia de Elías y la viuda de Sarepta. Su vida fue dura por la pérdida de su esposo, madre soltera, durante una época de sequía y a punto de morir de hambre, pero Dios convirtió sus temores en esperanza y provisión.


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Discusión #1: ¿Con qué parte de la historia de la Viuda te identificas? ¿Cómo ha provisto Dios milagrosamente para usted (física, emocional y espiritual)? Ore para agradecer al Señor por Su provisión.

#2 Reflexión personal: La Viuda fue bendecida físicamente por Dios al no permitir que se acabara el aceite y la harina hasta que terminó la sequía. Dios se preocupa por todas nuestras necesidades, pero especialmente por nuestra vida espiritual. La viuda no pareció creer quién era Dios hasta que le dio a Elías el poder de resucitar a su hijo, diciendo: “Ahora sé que eres un hombre de Dios, y que la palabra del Señor en tu boca es verdad." ¿Hay áreas en las que todavía esperas más de Dios, que se pruebe a sí mismo y creas en quién es Él? (por ejemplo, si consigo este trabajo, creeré que Dios provee; si mi esposo _____, creeré que Dios es bueno; si mi amigo no me traiciona, entonces creeré que a Dios le importa). Confiesa las formas en las que has dudado en confiar en el carácter y el amor de Dios por ti, luego ofrece gracias porque Él es Jehová Jireh (Dios proveerá).

Bono #3: En la historia, cuando Elías pidió el último pastel de la viuda, parecía que no se preocupaba por ella, ¡pero sabía que Dios quería bendecirla de maneras más profundas! La Biblia nos insta a cuidar de las viudas cuando no pueden cuidar de sí mismas. Busque Santiago 1:27, Sal. 68:5, Sal. 146:9, Mal. 3:5, Is. 1:23, 10:1-2, Ez. 22:6-7 y pregúntale al Señor si hay alguna viuda a quien puedas ayudar a cuidar emocional, espiritual, financiera o físicamente. ¡Servir a los demás es una bendición para ellos y para nosotros!